El certificado de historia de dominio, también conocido como ficha registral, es un documento oficial emitido por el Registro de la Propiedad que recoge toda la información legal y registral de un bien inmueble. Este documento certifica quién es el legítimo propietario, detalla los antecedentes de dominio y gravámenes, y brinda un historial completo de las transacciones o modificaciones legales asociadas al inmueble.
La importancia de este certificado radica en su función como herramienta clave para garantizar la seguridad jurídica en las transacciones inmobiliarias. Al contar con la historia completa del bien, se minimizan los riesgos de disputas legales o fraudes, proporcionando confianza a los compradores, vendedores e instituciones financieras involucradas en operaciones relacionadas con la propiedad.
Este documento es esencial en procesos de compra y venta de bienes inmuebles, hipotecas, herencias o divisiones de propiedad, ya que certifica la autenticidad de los derechos sobre el inmueble y asegura que no existan conflictos legales pendientes, como embargos o litigios.
La ficha registral no solo es una garantía de transparencia, sino también un recurso indispensable para la planificación urbana, el desarrollo de proyectos y la gestión patrimonial. Obtenerla es un procedimiento sencillo que puede realizarse directamente en el Registro de la Propiedad, ya sea de forma presencial o mediante sus plataformas digitales, asegurando un acceso ágil y confiable a esta valiosa información.
